Jocelyn Pedreros es madre de tres hijos, vivió durante 12 años en Santiago, pero hace un tiempo volvió a su tierra natal junto a sus pequeños a causa de una lamentable situación: era víctima de violencia de pareja.
Así lo afirma Jocelyn en un vídeo difundido a través de redes sociales, donde asegura que abrió tres causas en el Tribunal de Familia de Los Lagos: una por violencia intrafamiliar, por protección y por el cuidado personal total de su hijo menor, al que tuvo con su ex pareja.
Sin embargo, cuando empezaba una nueva vida y seguía el conducto regular a través de instancias judiciales y dispositivos de protección a la mujer y a los menores, todo habría quedado invalidado por una orden de la Corte de Apelaciones de Valdivia, que resolvió la separación de su hijo menor, de solo cuatro años de edad.
“Yo nunca me imaginé que él (su ex pareja) iba a llegar a la Corte de Apelaciones de Valdivia, iba a solicitar la entrega inmediata para que se hiciera efecto el cuidado personal compartido”, dice Jocelyn en el vídeo.
La mujer confirma que cuando vivía en Santiago efectivamente tenía el cuidado personal compartido del niño con el papá.
“Me atreví a dejar todo y venirme, a renunciar donde yo trabajaba, por temor y miedo al papá de mi hijo, legalmente yo tenía que ir a dejarlo porque era cuidado personal compartido”, dice.
Pero para la justicia, ese fue un error que Jocelyn no se podía permitir más allá de la situación de maltrato que ella vivía y que denunció, y la Corte de Valdivia dictaminó que el menor debía volver con su padre.
“Llegó carabineros, yo salí en ese momento de mi casa y del lugar junto a mi hijo más pequeño, dejando a mis otros dos hijos junto a mi hermana y mi mamá, y arrancando”.
Jocelyn optó por ocultarse, hoy es prácticamente una prófuga de la justicia, y sostiene que lo hizo para proteger a su hijo menor.
“El problema es que el Tribunal llevó una orden de búsqueda nacional, o sea donde me encuentren yo me voy detenida por defender a mi hijo, y además me quitan a mi hijo entregándoselo al padre, que es un maltratador”, afirma Jocelyn.
La madre futronina asegura que en “todos los informes que se iban presentando en cada audiencia se demostraba de que mi hijo no tiene un apego con su papá, le tiene miedo a su papá, así como yo también le temí muchos años y nunca dije ni hice nada, ahora sí me atreví y éstas son las consecuencias”.
Mientras se mantiene escondida junto a su hijo, Jocelyn implora que la ayuden y que las instancias judiciales la escuchen, lo que parece no ocurrirá, ya que la Corte de apelaciones de Valdivia se declaró incompetente frente el caso, y lo derivó a su igual de Temuco, pero dicha Corte confirmó el mismo dictamen.
“Estoy siendo buscada, entonces estoy escondida con mi hijo para protegerlo de un violentador y la justicia ahora me está diciendo que se lo entregue a ese violentador. Solamente pido eso, que me escuchen”, finaliza Jocelyn con angustia.
Desde Diario Sur se solicitó un pronunciamiento desde el Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género (Sernameg) de Los Ríos, acerca de este caso, quedando de entregar una respuesta durante la jornada.
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