Vilma Mora, hoy profesora en Futrono e integrante de un clan familiar identificado con El Llolly, recordaba ayer con dolor su paso por la casona. Ella y muchos entregaron sus recuerdos en redes sociales, al saber por DiarioPaillaco.cl y Radio Diferencia, que la gran casa construida en la década del 20, terminaba consumida por el fuego.
“Nadie más que los que tuvimos la oportunidad de estudiar y vivir en esta casa, sabe el cariño y la esperanza que teníamos en su reparación. Como no recordar ese oscuro y tenebroso subterráneo, el rincón de las palomas que nos despertaban por las mañanas, la esquina del muérdago donde buscábamos los nidos de gorriones”, rememoraba Vilma Mora, nieta de Abdón Mora, el último mayordomo que tuvo el otrora gran Fundo El Llolly.
“Qué tristeza más grande. Tuve el privilegio de vivir en esa casa, pasar mis primeros estudios. Me da nostalgia saber esta lamentable noticia”, dijo Mauricio Andrés Navarrete, junto con pedir que el o los responsables del incendio paguen ante la justicia.
Nury Fuentes recordó que su padre estudió allí. “Qué pena, por allí pasaron mis mis tíos, primos, yo también, con amiguitos que aún conservo. Es una gran desgracia”.
Maggi Fuentealba indicó que la pena es generalizada, pues la casona representaba generaciones de personas que nacieron y se criaron en El Llolly.
Paulina Fierro recuerda que muchas veces se solicitó seguridad y el cierre perimetral. Desde Puerto Montt el paillaquino Víctor Belmar expresó su esperanza en que se investigue y castigue ejemplarmente a los culpables del crimen “en contra de nuestra historia y nuestra cultura”.
Zunilda Martínez se pregunta si acaso los causantes del incendio fueron los mismos fantasmas que quemaron la casa Furniel de Río Bueno.
Fotografía gentileza Antonia Montecinos
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