Árbol partió casa por la mitad en Futrono: "De repente todo se oscureció"

Vecinos, residentes del sector Cun Cun, relataron instantes de terror. Familia de cinco integrantes necesita apoyo urgente tras perder todo su hogar.

El fuerte sistema frontal que vivió el país y en particular la zona cordillerana de Los Ríos, ha dejado múltiples personas damnificadas tras el paso de veloces ráfagas de viento. En las cercanías de Futrono, el pasado jueves 1 de agosto, la familia Quijón Ríos fue afectada por la caída de tres árboles sobre su hogar, donde finalmente perdieron todo.

Diario Futrono se trasladó al lugar y recogió un testimonio sobrecogedor de la familia futronina que se salvó por un milagro de una tragedia mayor. 

Tres árboles

Fue cerca de las 15 horas del jueves, en momentos de mayor intensidad de los vientos que asolaron la zona cordillerana con ráfagas superiores a los 100 kilómetros por hora, cuando tres árboles comenzaron a caer sobre el sitio que rodea la casa de la familia de Alicia Ríos y Patricio Quijón y sus dos hijos.  

El más grande, un álamo, se precipitó a las 16 horas, partiendo la vivienda en dos. Al momento del suceso, Alicia Ríos junto a dos de sus hijos se encontraban en el lugar. Fue su hija quien salvó a su hermano que tiene una discapacidad, llevándolo al interior de la casa en instantes que el árbol caía sobre sus dormitorios.

“Y mi hijo que es discapacitado estaba ahí, apoyado mirando hacia afuera. Mi otra hija que tiene 17 años estaba dando vueltas y de repente vio que se oscureció y tiró a su hermano para dentro”, comentó Alicia Ríos en conversación con Diario Futrono.

Finalmente, los tres lograron salir a través de una ventana de un cuarto que no se vio tan afectado por la caída del árbol, pero sí por la lluvia. Alicia señaló que la ventana por la que salieron era la que estaba a mayor altura en la vivienda. “Esta es la ventana más alta que tenía la casa. Mi chiquitito se golpeó en la rodilla al caer”, dijo.

Provisoriamente, la familia se tendrá que quedar donde uno de sus hijos, quien los ha albergado en su casa a la espera de la reconstrucción que fue comprometida por los dueños del Fundo San Andrés, lugar donde viven y donde el jefe de hogar ha trabajado por más 30 años.

“Perdimos todo, qué más se puede decir”, expresó Alicia, agregando que la comunidad que quiera cooperar con su situación, pueden ayudar con mercadería, loza, ollas y ropa interior o medias para sus hijos. 

Para quienes puedan realizar su aporte, el teléfono de Alicia Ríos es +56 9 4893 7689.