El angustiante relato de la única sobreviviente del triple homicidio de familia riobuenina

Reportaje revela detalles del crimen que estremeció a la Región de Los Ríos en marzo recien pasado.

El pasado 25 de marzo la comuna de Río Bueno y la Región de Los Ríos se estremecieron ante un violento crimen, que significó la muerte para una familia completa en su domicilio ubicado en Cayurruca.

La madrugada de ese lunes, un familiar directo del padre de familia, asesinó a este con un arma blanca, así también a la esposa embarazada de cuatro meses y a la hija de estos últimos, de tan solo diez años de edad. 

La familia Uribe-Tapia, dueña de la cadena de ópticas “Visión 2020”, fue ultimada a sangre fría por el hermano de Raúl Uribe, cuñado de Alejandra Tapia y tío de Valentina Uribe Tapia.

Del brutal crimen hubo una sobreviviente, una mujer quien se encontraba de visita en casa de los Uribe-Tapia y cuyo relato quedó en la querella ingresada ante el Juzgado de Letras y Garantía de Río Bueno, exponiendo los momentos horrendos que vivió esa madrugada, según lo publicado por el medio Biobío. 

“¡No, Francisco no! ¡¡A Raúl no, por favor!!” 

La testigo señaló que alrededor de las 00:50 horas, cuando todos dormían, irrumpió en la casa de forma sigilosa y previamente estudiada, Francisco Uribe.

Acto seguido, el hombre se habría dirigido directamente al dormitorio del matrimonio, atacando con un arma blanca a Raúl, propinando 17 puñaladas, según consigna el medio. 

La testigo y sobreviviente, que ocupaba una pieza próxima, se despertó por los gritos de Alejandra Tapia, esposa de Raúl. “¡No, Francisco no! ¡¡A Raúl no, por favor!!”, gritaba desesperada. 

Alertada de que algo muy malo estaba sucediendo, la mujer, desde su habitación atinó a escribir a un chat familiar que algo ocurría y acto seguido llamó a Carabineros. 

El hombre prosiguió su ataque contra su cuñada, acción que interrumpió para irse contra su sobrina que gritaba, a quien prácticamente degolló, sin escuchar las súplicas de la madre. 

Cuando iba nuevamente a atacar a Alejandra, el homicida se percató que había alguien más en la casa. En ese momento, la testigo salió de la habitación para ver qué ocurría. 

Francisco se le fue encima, dice la mujer en su relato, la empujó y alcanzó a propinarle un corte en el cuello, la mujer quedó en el suelo y Francisco se devuelve a rematar a Alejandra. 

Encerrada

Esos instantes la mujer aprovechó para encerrarse en la habitación, eso le salvó la vida. Pudo escuchar a Francisco caminando por el pasillo e incluso se lavó las manos. 

Luego, el hombre se dirigió a la habitación cerrada, amedrentando y amenazando a la mujer, pasando el cuchillo por la puerta, diciéndole que “ella sabía lo que le iba a pasar”, entre otras cosas. 

Pero de las palabras, el sujeto pasó a la acción, intentando derribar la puerta. La aterrorizada mujer puso un mueble contra la entrada y ella misma hizo presión para mantener afuera al descontrolado hombre, quien daba cuchillazos que atravesaban la puerta. 

Francisco también intentó romper la pared de la habitación desde un baño contiguo y luego volvió a forzar la puerta hasta romperla. “No solo la estructura sino (que) se sale de las bisagras, quedando partida en dos”, se expone en la nota. 

Francisco pudo meter un brazo hacia la habitación y le exigió a la mujer que le entregara el celular. Providencialmente, en ese momento se escuchó la sirena de la patrulla de Carabineros acercándose al domicilio. 

Francisco Uribe fue detenido y tres días después quedó en prisión preventiva, confeso y acusado por el delito de tres homicidios calificados y uno frustrado. Actualmente se mantiene en el centro penitenciario Llancahue de Valdivia. 

Inimputable 

Tal cómo ha expresado el abogado de la familia, el móvil del crimen habría sido una disputa familiar en base al negocio de las ópticas, donde el imputado trabajó. 

Por otra parte, el abogado del imputado pide la suspensión del procedimiento y alega problemas mentales del imputado.

De hecho, el abogado presentó certificaciones médicas que demostrarían que el imputado, desde el año 2016, sufre un “trastorno de carácter esquizofrénico”, lo que luego se modificó a “afectivo bipolar”. 

Por ello, se está solicitando que el tribunal considere al imputado como inimputable para efectos penales.