Después de 24 años del primer estudio sobre sexualidad en el país, este 2022 se retomará el tema a través de la Encuesta Nacional de Salud, Sexualidad y Género (ENSSEX) 2022-2023. En esta ocasión, unas 650 personas de la Región de Los Ríos participarán del estudio.
El instrumento permitirá levantar información sobre estas materias, abordando temas de bienestar y salud, orientaciones normativas, educación sexual, trayectorias y prácticas sexuales, orientación sexual, salud sexual y reproductiva, uso de anticonceptivos y embarazos, entre otros.
La Directora del proyecto, Pía Álvarez Iturriaga, socióloga y magíster en ciencias sociales, del departamento de Epidemiología del ministerio de Salud, en entrevista con Grupo DiarioSur profundiza sobre la ENSSEX que se aplicará a 20.000 personas en todo el país.
¿Por qué demoró tanto tiempo en volver a hacerse una encuesta de estas características?
"Por distintos factores. Presupuesto, priorizaciones diferentes de las distintas autoridades que han ido pasando por el ministerio. El levantamiento de otras encuestas de salud que también han demandado ejecución y se han puesto las prioridades en ellas.
Pero también pasó que vino la pandemia. El 2020 estábamos listos para entrar en la licitación y llegó la pandemia y tuvimos que detener todo ese proceso.
Este año se retomó y es una oportunidad que tiene el Estado de Chile para recolectar información a nivel de toda la población del comportamiento sexual, las nuevas formas de identidades de género, derechos sexuales y reproductivos, entre otros temas que aborda esta encuesta".
¿Cuál es la diferencia entre esta encuesta y la anterior?
"El primer estudio que se hizo en 1998 estuvo mucho más enfocado en términos de la pandemia por VIH Sida. Fue un estudio más acotado en términos de la representatividad.
Este estudio seguirá monitoreando lo que ha pasado con el VIH Sida y otras Enfermedades De Transmisión Sexual (ETS), pero también lo que pretende es considerar otros temas que no han sido abordados sobre la salud sexual y reproductiva de la población. Temas como fecundidad, infertilidad, orientaciones sexuales, identidad de género.
Todos los insumos van a repercutir en la política pública y ayudarán, por un lado, a evaluar las políticas públicas existentes y, por otro lado, a generar nuevas políticas públicas en función del nuevo contexto de la población".
¿Es una encuesta ambiciosa que debe requerir de una gran logística para su aplicación?
“Claro y por eso se licita quién la aplica. En este caso se la adjudicó la Dirección de Estudios Sociales del Instituto de Sociología de la Universidad Católica (DESUC). En todo el país van a estar desplegados alrededor de 200 encuestadores, más sus supervisores”.
¿Ya partió la aplicación en algunas regiones?
"Sí. Durante mayo se hizo una fase de pilotaje en ocho regiones del país, con el fin de ajustar el instrumento. Ver si se están entendiendo las preguntas, si se está seleccionando bien a la población.
Se aplicó al 10% de la muestra total, alrededor de 2.049 casos, en las regiones de Antofagasta, Coquimbo, Valparaíso, Metropolitana, O’Higgins, Maule, Ñuble, BioBío y La Araucanía. Ahora estamos en la segunda fase, con los resultados del piloto, mejorando el instrumento".
¿Entonces cuándo partirá realmente la encuesta?
“A fines de julio iniciamos el encuestaje en las 16 regiones del país”.
¿Cuánto demorará en aplicarse?
“El levantamiento total de la información no debería pasar más allá de octubre o noviembre”.
¿Cuánto demora la aplicación en cada encuestado?
“Depende del perfil de cada persona. Hay perfiles que salen muy rápido de la encuesta, pero en promedio debería estar durando entre 40 y 50 minutos”.
¿Cómo se realiza la elección de las personas a encuestar?
“La elección de hogares es aleatoria por comuna, localidad, manzana y persona de cada hogar, cuyo único requisito será tener más de 18 años. A principios de julio se hará el empadronamiento correspondiente, para empezar a aplicar el instrumento a fines de julio”.
¿Alguien puede negarse a ser encuestado?
“Claro y ahí se cierra ese caso, porque es voluntaria. También está la posibilidad de que alguien empiece a responder el cuestionario y luego se arrepienta y también está libre de dejar de responder”.
¿Eso complejiza el proceso, porque hay que volver a elegir a alguien más de esa manzana?
"Así es, por eso es una gran ayuda la difusión del proyecto, para que la gente esté informada.
Hay mucha reticencia a dejar entrar a los encuestadores a las casas, por un tema post pandemia y la percepción de inseguridad".
¿Cómo invitaría a la gente a participar de la encuesta?
"Diciéndoles que tengan la confianza, que esta es una encuesta completamente anónima, confidencial y resguardada bajo el secreto estadístico del Estado de Chile.
Esto es para hacer comunidad y mejorar las condiciones de vida de todos. La información solo se utilizará para hacer análisis de acuerdo con los distintos fenómenos de la sociedad chilena y finalmente ayudará también a las próximas generaciones".
¿Cómo explicar en términos simples cuál es la relevancia de este estudio?
"Este es un estudio que va a sentar las bases de aquí de los planes y políticas públicas del Estado de Chile para los próximos años, no solo en salud, si no en distintos sectores.
Esta encuesta es importante para la sociedad chilena porque al entregar la información solicitada las personas contarán una parte de sus vidas, lo que permitirá mejorar las políticas públicas.
Entonces mientras mejor tengamos identificados los fenómenos que se están dando actualmente en la sociedad chilena podemos mejorar más eficientemente las distintas condiciones de vida de las poblaciones, especialmente de las más vulnerables, como las mujeres, disidencias sexuales entre otras".
¿Pero hay temas complejos, difíciles de abordar para algunas personas?
"Este proyecto está revisado por el Comité de Ética científico. Antes de aplicar la entrevista, se aplica un consentimiento informado, porque sabemos que en este tipo de encuestas se develan muchos eventos traumáticos por primera vez y eso también implica hacerse cargo de la develación.
Por eso también hemos conversado con el ministerio de la Mujer para la activación de los distintos protocolos de alerta, si es que se llegara a pesquisar una vulneración de derechos y eso es también parte de lo que va a hacer el encuestador, que debe hacer recomendaciones a esa persona para dirigirse a tal o cual lugar.
Sabemos que es difícil, pero mientras mejor logremos comunicar el objetivo de esta encuesta, la gente lo va a recibir bien".
¿Los encuestadores están preparados para resolver cualquier complicación que se les presente al aplicar el instrumento?
"Ellos están capacitados para enfrentar estas situaciones. Tienen más de 18 años y pertenecen al stuff regular de la Universidad Católica y no es la primera vez que aplican una encuesta.
Son personas que saben cómo trabajar, pues es un oficio en el que se han especializado. Pero además capacitamos a los encuestadores de cada región en este instrumento en particular. Desde cómo preguntar, la entonación y su imagen corporal, entre otros factores".
¿La gente puede corroborar quién es su encuestador?
"Sí. Los encuestadores tendrán chaquetillas de la Universidad Católica y una credencial. Además será posible saber si se trata de un encuestador validado en la siguiente página web: http://epi.minsal.cl/ensex-encuestador/".
Los resultados de la Encuesta Nacional de Salud, Sexualidad y Género (ENSSEX) 2022-2023 serán públicos y se espera que estén disponibles el año 2023 en la web de Epidemiología del ministerio de Salud: http://epi.minsal.cl/resultados-encuestas.
Para mayor información sobre este instrumento puedes acceder al sitio web del Departamento de Epidemiología del Ministerio de Salud: http://epi.minsal.cl/.
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