Opinión: Que los árboles no impidan ver el bosque

Columna del director regional de Serviu, Rodrigo Sepúlveda Espinoza, a propósito de la polémica por Fundación Democracia Viva.

Sin duda, para todos quienes estamos en lo público y ejercemos funciones diarias con la ciudadanía, lo sucedido en la Región de Antofagasta con la Fundación Democracia Viva es totalmente repudiable. La transparencia en la gestión y la probidad técnica y administrativa debe ser siempre una directriz de trabajo de todos los funcionarios públicos, entendiendo que estamos sometidos a rígidos controles de gestión, auditorías y revisiones permanentes que revisan y fiscalizan nuestro actuar. 

Pero siempre puede haber un puñado de personas que quieran aprovechar el momento, la instancia o la “ganada corta”, para cometer irregularidades, afectando la honra de miles que cada día hacen su trabajo entregando lo mejor de sí en términos profesionales y personales. Hoy lamentablemente nos toca como Ministerio de Vivienda y Urbanismo estar en el ojo del huracán y, más doloroso aún, con un programa que está dirigido a las personas más pobres de este país, como son las familias que viven en campamentos. 

No es un hecho nuevo el trabajo con Fundaciones u ONG’s. Al contrario, es una práctica habitual de todos los organismos del Estado, aprobados por la Dirección de Presupuesto, validados por Contraloría General y que en la gran mayoría de los casos han tenido una evaluación muy exitosa. 

El MINVU y SERVIU históricamente han sido organismos muy valorados por la ciudadanía. Somos un ministerio social que trabajamos con una de las aspiraciones más sentidas por la gente, como es el obtener su vivienda propia. Aportamos a la ciudad con obras urbanas, espacios públicos y planificación territorial, entregamos un sinnúmero de beneficios a personas, grupos y organizaciones sociales cada día y eso nos hace reconocernos como una institución sólida, proba y transparente en la entrega de recursos que pertenecen a todos los chilenos y chilenas. Esto no quita, por ningún motivo, que permanentemente revisemos nuestros procedimientos internos, modifiquemos la forma de asignación de recursos para el trabajo con los campamentos y seamos celosos en resguardar cada peso público.

Rodrigo Sepúlveda Espinoza
Director regional de Serviu