De Urresti: “Esperábamos un cambio de gabinete que recogiera malestar ciudadano, ahora solo resta cumplir el programa”

Senador destacó que el desafío es cumplir con los compromisos programáticos del gobierno

Luego de concretado el anunciado cambio del gabinete ministerial, el senador por la región de Los Ríos Alfonso De Urresti dijo que “la verdad es que esperábamos un cambio de gabinete que recogiera el malestar ciudadano, especialmente en el área de conducción política, pero eso lamentablemente no ocurrió. Ahora lo importante es que el nuevo equipo que ha convocado la Presidenta Bachelet se aboque, desde el primer día, a cumplir con los compromisos programáticos que el gobierno de la Nueva Mayoría adquirió con la ciudadanía cuando fue electo”.

De los tres cambios ministeriales producidos, el legislador del PS destacó el “importante rol cumplido por el saliente ministro Marcelo Díaz el último año y medio, el que confiamos seguirá ejerciendo la nueva ministra Paula Narváez, a quién conocemos por su trabajo como ex directora regional del Sernam y ex seremi del Trabajo, cuando la provincia de Valdivia aun integraba la región de Los Lagos”.  

De Urresti recordó que “como Nueva Mayoría tenemos una intensa agenda de trabajo en el futuro inmediato, con temas tan relevantes como la institucionalidad para el cambio climático y la política forestal, la creación de los ministerios de Ciencia y de Cultura, el proceso constituyente, la despenalización del aborto terapéutico y la elección de los gobernadores regionales, entre otros. Son nuestros compromisos adquiridos con la ciudadanía y sobre los cuales debemos trabajar para cumplirlos. Sólo ello nos permitirá seguir contando con la confianza de los ciudadanos para un próximo período de gobierno”, declaró el legislador PS.

El parlamentario enfatizo que “ciertamente el cambio de gabinete por sí mismo no asegura que cumplamos gran parte de nuestros compromisos, porque para eso también es necesario que los partidos de la Nueva Mayoría aporten mejor coordinación y capacidad de resolución de conflictos, para que la articulación política entre los partidos y con el Ejecutivo permitan viabilizar una agenda legislativa priorizada, lo que es particularmente importante en un año electoral”.