Fue un 27 de enero de 1898 hace 125 años que se creó el pueblo de Reumén, en la comuna de Paillaco, y que, de hecho, es un asentamiento más antiguo que este.
A fines del siglo XIX el auge del ferrocarril en la zona era un hecho con la iniciativa de unir Valdivia y Osorno a la línea férrea.
Según el libro Historia de Reumén (2007) de Eduardo Araneda, en 1894, el Ministro de Industria y Obras Públicas llama a propuesta pública para la construcción de la línea del ferrocarril entre Valdivia y Pichirropulli. La obra fue adjudicada a Adolfo Nicolai, quien se comprometió a concluir los trabajos en poco menos de tres años.
Nicolai inicia los trabajos el 1 de junio de 1894, pero las faenas de construcción del ferrocarril tuvieron una serie de inconvenientes, entre ellos, la rigurosidad del clima y lo intrincado del relieve.
Además, dificultades para el traslado de materiales, problemas de aprovisionamiento, escasez de mano de obra, epidemias como la viruela, las huelgas por atraso en los pagos y las expropiaciones que a veces no dejaba conformes a los ex dueños.
Las cuadrillas de los obreros, llamados carrilanos, se instalaron en el lugar en 1895 y comienza el despeje del tupido bosque de canelos existentes, construyendo los terraplenes y ejecutando los cortes de terreno entre los ríos Cuinco y Collilelfu. Ya en 1895 se inauguraba el tramo Osorno-Pichirropulli.
Según Eduardo Araneda, el 27 de enero de 1898 terminan los trabajos en la estación de Reumén y con este hecho se funda un nuevo pueblo.
Reumén se convertirá en pocos años en el punto de convergencia de los habitantes del lago Ranco y la zona cordillerana andina, como también de los habitantes de las montañas de Cufeo, ubicadas al sur poniente del nuevo pueblo, y de Chanco, del sector norte.
El diario El Correo de Valdivia del domingo 16 de mayo de 1926, difundió la noticia del hallazgo de un antiguo cementerio indígena en Reumén.
La información indica que se descubrieron seis sepulturas, olletas, platos y cántaros de greda y piedra. Fue el primer indicio de los antiguos habitantes del poblado, los huilliches.
Posteriormente, el 30 de marzo de 1932, El Correo de Valdivia informó de un nuevo cementerio indígena “ubicado casi al lado del cementerio actual”, según constata.
Los primeros habitantes fueron huilliches y puede que el primer habitante hispano haya sido don García de Alvarado que recibió el 4 de septiembre de 1562, diez años después de la fundación de Valdivia, la encomienda de las tierras de Lumaco en la ribera oriental del Collilelfu.
Desde la mitad del siglo XIX destaca la familia Huenutripay con adquisición de terrenos y su descendencia sigue vigente en Reumén hasta nuestros días.
Según el libro Historia de Reumén, El 6 de enero de 1899, Rosario Vásquez vende a su hijo menor Quirino Vásquez Fontena, en $2.000, una parte del fundo Reumén que le corresponde.
Los límites son al norte el río Cuinco que desagua en el Collilelfu que forma una especie de arco, hasta cortar la línea del ferrocarril y la estación de este que corta los ríos Collilelfu y Cuinco.
En este lugar se instala el pueblo de Reumén y será Quirino Vásquez quien venda o done sitios a los primeros habitantes del lugar.
Allí, en 1904, los misioneros Capuchinos de Bavaria levantan la primera capilla religiosa que “era como una ruca grande, con techo de matas de chupones y empalizadas de canelos con una enorme cruz de pellín”, según describe el libro de Eduardo Araneda.
El paso del ferrocarril era fundamental en la vida del pueblo y por lo mismo, fue un impacto el primer accidente ferroviario ocurrido en Reumén el 22 de enero de 1903.
Así lo informó El Correo de Valdivia al día siguiente, según el libro de Eduardo Araneda: “CHOQUE DE TRENES”: “El tren que ayer condujo al interior al ex ministro de Relaciones Señor Donoso Vergara i distinguidos acompañantes, chocó con un tren de carga (no sabemos bien en Reumén o la estación siguiente) que había partido con media hora de anticipo i que tuvo que pararse en el trayecto a causa que se le concluyó el vapor.
Por fortuna el maquinista del tren especial pudo advertir el peligro i dio contra vapor no tan a tiempo como hubiera querido para evitar el choque que se produjo mas o menos violento sin que se originaran desgracias personales”.
Reumén quedó dotado de infraestructura donde destaca su estación de trenes, el puente ferroviario sobre el río Collilelfu que fue construido en 1896, la plaza de armas, la iglesia, el correo, la escuela pública (actualmente Escuela Roberto Ojeda Torres) y su internado, la escuela parroquial (actualmente Escuela San Luis) y el ex-hotel Colonia (demolido en 2016).
Reumén se va a transformar tempranamente, gracias al ferrocarril, en el principal proveedor de cáscaras de lingue para las curtidurías valdivianas entre 1912 y 1913.
Los principales productores de la zona de Reumén son los hermanos González Quiroga, los hermanos Vásquez Fontena y el austriaco Jorge Paschcuan.
Los propietarios agrícolas de Reumén difícilmente imaginaron lo que el ferrocarril significaría en la comercialización de sus productos, los que llegan hasta Santiago donde el principal comprador es Corte Angüita y Cía.
La actividad maderera seguirá subsistiendo con mucha fuerza hasta 1973. Los viajeros que pasaban por Reumén, desde los vagones del tren podían observar en el recinto de la estación cientos de “castillos de madera” que constituían una postal paisajística del pueblo, relata el libro de Araneda.
La actual iglesia de Nuestra Señora de Lourdes es declarada monumento histórico nacional en 2018.
Según el Consejo de Monumentos Nacionales de Chile, el templo fue construido por Wenceslao Solís Atero y su equipo, e inaugurado el 3 de marzo de 1935 con una misa oficiada por el sacerdote capuchino Guido Beck.
Fue en 1935 que se bendijo la imagen de la Virgen de Lourdes, previamente donada por Raquel Ojeda de González y en la tarde de ese mismo día se realizó una concurrida procesión, donde la referida imagen fue paseada por las principales calles del pueblo.
En 1985 se inició una campaña para restaurar la iglesia, cuya precursora fue la hija del constructor de la estructura, Sara Solís Figueroa, quien con el apoyo de la comunidad crea el "comité de acción católica para la restauración y mantención de la iglesia".
La materialidad de su estructura y revestimientos es completamente de maderas nativas, y su forma es característica de las iglesias construidas durante la primera mitad del siglo XX en el sur de Chile.
La fiesta religiosa más importante en la iglesia de Reumén es la de la Virgen de Lourdes, todos los 11 de febrero, festividad que trae a miles de devotos de toda la región.
Reumén también fue protagonista de una tragedia terrible cuando la mañana del domingo 6 de abril de 2014 el hogar de reposo Magaly Zapata se quemó por completo.
En el hogar residían 12 pacientes entre ancianos y enfermos psiquiátricos. Nueve de ellos y la cuidadora de turno, murieron abrasados por las llamas.
También en 2010 se inaugura la moderna Posta de Salud Rural de la localidad que entrega cuidados básicos y primeros auxilios para sus habitantes.
Reumén sigue lleno de nostalgia por los años del ferrocarril y auge maderero. Testigo silencioso de ese pasado es la pequeña máquina que está en la plaza de armas como homenaje a esos primeros habitantes del pueblo.
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