Equipos municipales de Lago Ranco y Futrono, correspondientes al programa de desarrollo territorial indígena (PDTI) y Prodesal, se encuentran emplazados en el límite cordillerano de ambas comunas para evaluar la situación de los pequeños agricultores.
De acuerdo a lo informado a Diario Lago Ranco por la oficina de comunicaciones del municipio ranquino, los equipos de ambas comunas salieron temprano hacia el área de Rupumeica Alto y Bajo, Pichico, además de otros sectores, para determinar el nivel de ceniza derivada de la erupción del volcán Calbuco.
FORRAJE Y AGUA POTABLE
La equipos buscan determinar el daño provocado por la ceniza en las praderas de pastoreo y cuantificar las necesidades de apoyo en forraje.
El alcalde Santiago Rosas indicó al respecto que se comunicó con el Gobernador del Ranco para coordinar la eventual ayuda y así garantizar el alimento para los animales, debido a que la ceniza cubrirá el pasto. “Estamos a la espera de respuesta”, concluyó.
También se informó a Diario Lago Ranco del trabajo que desarrolla la Oficina de Planificación para evaluar la calidad del agua que proviene de captaciones superficiales, las que habrían recibido volúmenes indeterminados de ceniza.
La tarea es apoyada por la funcionaria Bernarda Huinca, quien coordina a los comités de agua potable de la zona rural ranquina.
OFICINA DE EMERGENCIA
Diario Lago Ranco se comunicó con Germán Olea, encargado comunal de emergencia, en los momentos que se encontraba en Riñinahue, confirmando que el cielo estaba nublado, pero no caía cenizas (a las 11.00 am).
“Lo más preocupante es el polvo en suspensión derivado del tránsito vehicular”, explicó.
Olea dijo que se estaba distribuyendo agua para beber en camión aljibe y estanques, y que en horas de la tarde funcionarios municipales llevarían agua envasada hasta los sectores más apartados.
Fotografías gentileza M.C Cartes
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