Hoy 14 de octubre los feriantes de Valdivia volvieron a tomar las calles en una nueva marcha de protesta en rechazo a las decisiones tomadas por la administración municipal respecto al traslado de sus puestos de trabajo.
Los comerciantes expresaron su frustración por las múltiples irregularidades que, según ellos, ha cometido la administración municipal.
En grupo y portando banderas chilenas y pancartas, los feriantes se reunieron en las cercanías del terminal de buses de la ciudad, desde donde salieron en un recorrido por Avenida Picarte hacia la Plaza de la República.
La manifestación se desarrolló sin problemas y con el resguardo correspondiente.
Paulina Bustos, presidenta del Sindicato de Comerciantes de Ferias Libres, expresó su preocupación por las posibles acciones que el municipio respecto al traslado de las ferias.
“La alcaldesa quiere llevar las ferias libres, itinerante como funciona acá, a la periferia a lugares donde no hay casas. La verdad es que eso va a matar la feria, porque ya ocurrió con la que se instalaba los lunes en Las Ánimas", dijo.
En cuanto a las conversaciones con la alcaldesa Carla Amtmann, la representante mencionó que, aunque en un principio se prometió crear una mesa de trabajo para abordar la situación, nunca se materializó un diálogo real.
Según Bustos, fue organizada una única reunión en la que presentó el plan de "modernización de feria libre", sin tomar en cuenta las propuestas de los comerciantes.
Finalmente, la dirigente subrayó que aunque la alcaldesa los ha recibido en ocasiones, sus opiniones nunca han sido consideradas en la toma de decisiones, lo que ha llevado a un estancamiento en las gestiones y a la actual situación de incertidumbre y descontento.
Este conflicto no es nuevo. En mayo de este año, los feriantes también se habían movilizado para expresar su descontento por un posible traslado de sus puestos.
En aquella ocasión, recorrieron el mismo trayecto reclamando por una orden de desalojo que entraría en vigor a fines de ese mes. Los comerciantes argumentaron que, si bien reconocen la necesidad de un ordenamiento en las ferias, el desalojo los afectaba gravemente.
Por su parte, la alcaldesa Amtmann señaló que la situación de las ferias libres en Valdivia es un problema que lleva más de 20 años sin solución, y que su administración ha trabajado en conjunto con otros organismos para abordar la problemática.
Parte del conflicto se relaciona con un antiguo proyecto para la construcción de una Feria Central Techada, que lleva más de dos décadas en carpeta. Según lo mencionado por el consejero regional Matías Fernández a Diario de Valdivia en una ocasión anterior, el proyecto se encontraba en etapa de prefactibilidad, con un presupuesto asignado para determinar la viabilidad del mismo. Sin embargo, aún no se había concretado un diseño final ni se había definido un lugar de emplazamiento.
En los últimos años, ha habido cambios en la ubicación de algunas ferias. Por ejemplo, a inicios de 2024, se trasladó la feria de los días viernes unos metros más adelante para facilitar el acceso de los vecinos de calle San Miguel, quienes habían manifestado problemas de circulación y limpieza. Este cambio fue respaldado por las juntas de vecinos y ratificado por la justicia.
Otro punto conflictivo ha sido la feria de la población Bernardo O'Higgins. Marcelo, vecino del sector, explicó a Diario de Valdivia que desde hace tres años los vecinos de la calle Río Calle Calle han solicitado el traslado de la feria de los miércoles debido a problemas de espacio, daños en la infraestructura, dificultad para la entrada de vehículos de emergencia, entre otros.
El 9 de enero de 2023 hubo una audiencia pública, en la que vecinos de la población Bernardo O´Higgins manifestaron los problemas que les aquejaban por la existencia de la feria libre.
El segundo semestre del mismo año hubo una consulta pública en el sector, donde la mayoría de los vecinos decidieron el traslado de la feria. Fue un 87% de los votantes quienes se decidieron por el cambio, pero -de acuerdo con el municipio- los feriantes desistieron del traslado.
No hay nueva definición al respecto.
“Se nos abrieron las puertas de la municipalidad, nos escucharon por primera vez, ninguna alcaldía tuvo el coraje de tomar este problema, que no es fácil, esta alcaldía tuvo esa valentía y las ganas de solucionar este problema”, señaló Marcelo.
Sin embargo, el municipio decidió retrasar esta medida tras conversar con los feriantes, asegurando que no hay una nueva definición sobre el destino de esta feria en el corto plazo y que nuevos procesos serán informados debidamente, según indicó el alcalde subrogante Cristian Oñate.
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