De acuerdo con el 39° Informe de Deuda Morosa realizado por la Universidad San Sebastián y Equifax, correspondiente al cuarto trimestre de 2022, mostró un aumento cercano a 2 mil personas en la cantidad de morosos en Los Ríos en 2022, lo que equivale a un alza de 2,3% anual, dejando a la región con un total de 86.868 morosos.
La mora promedio en Los Ríos alcanzó los $1.490.790 (-12,3% versus diciembre de 2021). En el análisis por tramo de mora, un 46,9% de las personas con compromisos impagos presentan deudas por montos menores a los $300.000; si se consideran cantidades hasta $750.000, el porcentaje corresponde al 66,9% del total del periodo.
Para Alejandro Weber, decano de la Facultad de Economía y Gobierno de la USS, “este aumento era esperable, ya que acumulamos la inflación más alta en 30 años, los salarios reales cayeron y el desempleo aumentó en torno al 8%; lo que afectó los ingresos de las familias y su capacidad para cumplir con los compromisos crediticios”.
“Debido a los retiros de los fondos de pensiones y ayudas estatales, durante 2021 hubo un aumento de liquidez y nuestros informes previos permitían inferir que esos montos estaba siendo utilizados para saldar deudas. El escenario cambió drásticamente en 2022 y para este año el panorama no es auspicioso. El PIB se contraerá hasta un 2% y la inversión en torno a 5%, lo que repercutirá seguramente en un aumento del desempleo, de la informalidad y de las cifras de morosidad”, explica Francisco Mena director de la carrera de Ingeniería Comercial de la USS Sede Valdivia.
En cuanto a las comunas que concentran la mayor proporción de deudores morosos sobre la población mayor de 18 años en Los Ríos, se determinó que La Unión tiene un 32,7%; Valdivia un 31,6%; Máfil un 31,5%; Los Lagos un 30,6%; y Paillaco un 30,3%.
Las comunas con mayor mora promedio en Los Ríos son: Valdivia ($1.776.950), La Unión ($1.440.685), Lanco ($1.336.320), Río Bueno ($1.321.401) y Corral ($1.181.149).
Según el académico de la USS, parte de la solución para salir de la morosidad debe ir en la línea de la educación financiera, que incluye aspectos como determinar la atemporalidad al momento de adquirir un crédito, además de evitar aceptar este tipo de compromisos comerciales sin antes cotizar.
“A la hora de acceder a un crédito primero hay que ver la temporalidad, es decir, determinar si somos capaces de servir una deuda de uno a dos años y tener en la mente ese flujo de dinero que se necesita para poder pagar ese compromiso para no entrar en morosidad. Lo ideal es que si a uno le están ofreciendo una tasa de interés, que están bastante altas, uno pueda a lo menos ver en otras instituciones como está el servicio de esa deuda”, cerró Mena.
Para finalizar, el académico de Ingeniería Comercial enfatizó en la importancia de que las familias cuenten con un presupuesto que les permita sostener y sustentar pagos mensuales de créditos.
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