Llegan los meses fríos al sur del país y el uso de leña para calefacción se intensifica.
Es parte de una cultura sureña que en pleno siglo XXI se continúe empleando este recurso para brindar calor a los hogares.
Si bien la leña en el último tiempo ha subido de valor considerablemente, (el metro de cualquier variedad está por sobre los 35.000 pesos) la aparición de otras variedades como el aromo y el eucaliptus han hecho que su uso se mantenga.
Acusada periódicamente de ser fuente primordial de la contaminación ambientales en ciudades como Valdivia, Osorno y Coyhaique, la utilización de leña –al parecer- está lejos de desaparecer.
“La leña de por sí no es dañina. Si contamina es por malas condiciones de uso, porque si se tiene la tecnología suficiente y material de calidad, no debiésemos tener problemas de contaminación”, explica el profesor de la Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza de la Universidad de Chile, Alejandro García.
“La leña no es un problema. De hecho, es el combustible más barato y más extendido que tenemos en el mundo. El problema está en cómo lo usamos, cómo legislamos y cómo proveemos a nuestras comunidades de las herramientas y los instrumentos para hacer un buen uso de ella”, agregó el profesor Manuel Paneque de la Facultad de Ciencias Agronómicas.
El profesor Dr. Francisco Burgos, académico de la Facultad de Ciencias Forestales y Recursos Naturales de la Universidad Austral de Chile y miembro del Núcleo Invent de la Uach, en entrevista con Diario de Valdivia, comentó que el factor más importante a la hora de seleccionar un tipo de leña para calefacción es la humedad posee.
“La cantidad de agua que trae la leña por un lado impide una completa combustión y por otro, disminuye la cantidad de energía calórica que se puede obtener de la misma. En otras palabras, de un mismo trozo de leña podemos sacar más energía cuando está seca”, comentó.
-¿Cómo se puede enseñar a la comunidad a hacer un buen uso de la leña y evitar contaminar?
-"Hoy en día existen programas o campañas para el buen uso de la leña que no son lo suficientemente masivos para que lleguen a todos los usuarios. Se necesitan campañas que sean más agresivas en sus mensajes para que los usuarios comiencen a exigir productos de calidad y no solo en el contenido de leña sino también en el origen de la misma".
“Mucha de la leña de nativo que se comercializa se hace de manera informal, lo que implica la inexistencia de manejo forestal de los bosques, no hay trazabilidad de los productos y menos existe una boleta que pueda permitir a los consumidores un servicio al cliente por leña de mala calidad”, agregó el profesor Burgos.
-¿La leña sigue siendo un recurso renovable?
-"La leña o mejor dicho la biomasa es por definición renovable, pero eso depende de cómo es que se estén gestionando los recursos, si se hace a una velocidad mayor al crecimiento natural del bosque con el correr del tiempo el bosque desaparecerá y sucederá lo mismo que ocurrió con la madera de los bosques del Sur de Chile durante el siglo XX, los cuales hoy no son capaces de generar madera de buena calidad en las cantidades que necesitamos como sociedad para tener casas de madera de buena calidad".
-¿Por qué hay que evitar el uso de la leña húmeda?
-“La humedad de la leña provoca una combustión incompleta que produce material particulado (MP), causante de la contaminación atmosférica de las ciudades en el sur de Chile. El MP se ha clasificado principalmente en dos tipos: El MP10 y el MP2,5 que se diferencian en el tamaño de partículas medido, el primero, MP10 son las partículas hasta un diámetro de 10 µm y las segundas MP2,5 hasta 2,5 µm de diámetro, ambas pueden causar serios problemas respiratorios a las personas que las respiran, especialmente las MP2,5 que son capaces de llegar hasta lo más profundo del sistema respiratorio”.
“Otra razón para evitar la leña húmeda tiene que ver con la eficiencia energética en el uso de este combustible, ya que al poseer altos contenidos de humedad mucho del calor se pierde en evaporar el agua y se va por los caños. Cuando se usa leña seca podemos obtener más calor y eso implica al mismo tiempo que usemos menos leña para calefacción".
-Hoy en día se emplean nuevas variedades de leña en los hogares: eucaliptus, aromo, entre otros. ¿Qué tan recomendables son?
-"En general la biomasa posee propiedades energéticas homogéneas por lo que desde el punto de vista de la leña como fuente de energía es similar usar especies nativas como exóticas, como las que mencionas en la pregunta".
“Ahora, desde el punto de vista de las características de las especies existe una diferencia en la densidad que poseen, en general, las especies nativas que usamos para leña tienen una densidad un poco más baja, lo que significa que por cada unidad de volumen que compramos, metros cúbicos, existe una diferencia en la cantidad de masa que se compra”.
“Como la energía se mide por unidad de masa y si la densidad de la especie considerada es menor y que ambas tengan la misma humedad, implica que cada metro cúbico tiene menos masa y por ende entregará menos energía”.
“Las especies mencionadas tienen una mayor densidad por lo que en principio entregan más energía. Podrían estar al nivel de densidad que posee la leña de ulmo, que es una de las más valoradas entre las personas que usan leña”.
“Otro punto importante es que al ser especies que provienen de plantaciones, el uso de ellas implica que no se está extrayendo bosque nativo para usar como leña, lo que redunda en una menor presión sobre nuestros bosques, que en general no poseen planes de manejo aprobados por Conaf”.
“Mucha de la leña de nativo que se ocupa en invierno no tiene un manejo sustentable y es la causa de que sea cada vez más escasa o incremente sus precios al ser trasladada desde lugares más alejados”.
-¿Qué tan incidente es el uso de la leña en la contaminación ambiental en ciudades como Valdivia, Osorno y Coyhaique?
-"Los antecedentes de los planes de descontaminación atmosférica (PDA) vigentes en el sur de Chile muestran que la principal fuente de material particulado en invierno es la quema de leña húmeda. Dichos antecedentes proceden de estudios que se realizaron previo a la implementación de los PDA y que se realizan bajo procedimientos estandarizados y confiables".
-¿Qué ventajas y desventajas tiene el uso de pellet en calefacción? ¿Es el futuro de la calefacción en el sur?
-"La gran ventaja que posee el uso del pellet es la eficiencia energética que se logra al usar un combustible seco. En general los pellets poseen un contenido de humedad bajo el 10%, en comparación de la leña húmeda que puede estar sobre el 25% de humedad y lo normal es que tenga niveles entre el 40-50% o más".
“Otra ventaja es que es regulable la alimentación de la estufa ya que estos calefactores (a pellets) vienen con tecnología incorporada lo que aumenta la eficiencia del calefactor, por lo que hay un doble efecto, bajo contenido de humedad y mayor eficiencia del calefactor”.
“Entre las desventajas es que estamos importando desde fuera de la región todo (o casi todo) el pellet que usamos, esto tiene un efecto menos visible en la huella de carbono que aumenta para la ciudad como un todo o que estamos desaprovechando biomasa forestal residual para la producción de energía”.
“Otra desventaja que se ha dado antes y que se espera no vuelva a ocurrir es el desabastecimiento de pellets (que ocurrió en los inviernos del 2020 y del 2014) producto del desajuste entre el nivel de producción y el de consumo, es decir, cuando se produce menos de lo que se quema".
“Y si es el futuro, puede ser parte de las soluciones, ya que el cambiar nuestra matriz energética fósil (petróleo, gas, carbón, parafina) a una basada en energías renovables requiere que existan varias de ellas funcionando para que todas las personas puedas beneficiarse de ellas, energías limpias que no contaminan ni local ni globalmente”.
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