Un ciberataque a JBS, la mayor empresa de procesamiento de carne del mundo, ha dejado a EE.UU. sin una quinta parte de su capacidad de producción de carne de ternera.
La empresa, con sede en Brasil, reconoció ayer martes ante los gobiernos de EE.UU. y Australia que muchos de sus mataderos y salas de despiece y empaquetado de carne se han visto obligadas a parar la producción por tener bloqueados los ordenadores.
El ataque ha afectado a la inmensa mayoría de las plantas de procesamiento de de ternera, cerdo y aves de la compañía en ambos territorios, pero las consecuencias son especialmente graves en el caso de las primeras, ya que JSB es responsable de la quinta parte del mercado de carne de ternera del país.
"JBS USA es una parte crítica de la cadena de producción alimentaria y sabemos que tenemos la responsabilidad de recuperar la actividad cuanto antes", ha dicho Andre Nogueira, responsable de la filial norteamericana de la empresa, sobre la situación. JBS espera retomar la actividad a lo largo del miércoles 2 de junio.
ESTRATEGIA CONOCIDA
El incidente, sin embargo, ha disparado las alarmas en el país, que apenas se ha recuperado de los efectos de un ataque similar sobre el oleoducto Colonial Pipeline, encargado del transporte de petróleo a lo largo de la costa este de EE.UU.
A principios de mayo, un grupo de hackers conocido como DarkSide logró acceder a los sistemas de Colonial Pipeline aprovechando una conocida vulnerabilidad de software y cifró todo su contenido. A continuación, exigió el pago de exigió el pago de 5 millones de dólares para descifrarlo.
Este tipo de ataques en los que la información de la empresa se convierte en rehén se conoce como "ransomware" y están en auge en todo el mundo.
La paralización de las operaciones de Colonial Pipeline tuvo como consecuencia serios problemas de abastecimiento en muchas gasolineras del sureste de EE.UU. Finalmente, y ante la presión mediática y el potencial conflicto geopolítico, DarkSide, decidió entregar las claves de cifrad a Colonial Pipeline.
Según la empresa, no se hizo ningún pago por estas claves, pero DarkSide ha tenido una carrera muy lucrativa en los últimos años con ataques similares. Muchas empresas no tienen más remedio que pagar cuando son atacadas porque el coste de paralizar su actividad es mucho mayor que la cuantía del chantaje.
Según varios investigadores independientes, entre 2020 y 2021 DarkSide podría haber ingresado mas de 90 millones de dólares (73 millones de euros) con este tipo de ataques.
En el caso de JBS aún no se conoce al responsable, aunque desde la Casa Blanca apuntan a un grupo de atacantes que ha actuado desde Rusia. "Estamos colaborando directamente con el gobierno ruso en este asunto y transmitiendo el mensaje de que es imperativo que los estados no albergan criminales que realicen ataques de ransmoware", ha explicado Karine Jean-Pierre, portavoz de la Casa Blanca.
Fuente: El Mundo.
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