Monseñor Santiago Silva asumió la Diócesis de Valdivia

“Vengo a ser padre y pastor y juntos debemos vivir en la sinolidad y servicio”, expresó el nuevo obispo en su primera misa oficial. La ceremonia contó con la presencia del Nuncio Apostólico Alberto Ortega.

En una eucaristía en el templo Catedral, que se transmitió a través de redes sociales, monseñor Santiago Silva Retamales asumió su nuevo ministerio como Obispo de la Diócesis de Valdivia.

La eucaristía contó con la presencia del nuncio apostólico Alberto Ortega, el administrador apostólico Gonzalo Espina y el sacerdote César Márquez, quienes acompañaron al obispo Santiago Silva. 

La ceremonia religiosa se inició con un saludo del padre Gonzalo Espina quien recordó que la Diócesis de Valdivia estuvo 3 años y medio sin obispo, tiempo en que asumió la administración, siempre tratando de privilegiar a los pobres. Posteriormente intervino el Nuncio Apostólico Alberto Ortega, quien primero lamentó que la investidura de monseñor Silva no se haga con presencia de los fieles y recordó al Papa Francisco y le pidió a nombre de él “total disponibilidad a su misión”.

La ceremonia se hizo oficial cuando la secretaria del Obispado, Alejandra Oyarzún, leyó la Bula Papal con el nombramiento del nuevo obispo donde dice “cuidarás pues que el pueblo y el clero sigan el Evangelio y guiarás al pueblo”. La Bula fue firmada por Papa Francisco el 23 de diciembre de 2020 y posteriormente la secretaria exhibió el documento original a los fieles que siguieron la transmisión.

Luego de eso el Nuncio Ortega invitó al obispo Silva a tomar posesión de la sede episcopal y el padre Gonzalo Espina le entrega el báculo de pastor con lo que se oficializó el nombramiento.

VIVIR EN ESPERANZA

En su primera homilía (prédica), Santiago Silva recordó que hoy se celebra la solemnidad de San José y, tomando la figura de este santo esposo de la Virgen María y padre adoptivo de Jesús, expresó que José fue “un hombre justo que nos muestra la imagen de cómo debe ser la Diócesis”, y añadió que ésta debe dejar que Jesús los seduzca, pero reconociendo que es una comunidad que camina en gracia y pecado, que debe pedir perdón, saber reconocer sus defectos, pero peses a todo no perder la esperanza porque la fe en Jesús “nos hace nuevos por su vida entregada en la cruz”. 

El nuevo Obispo pidió a la Diócesis de Valdivia “vivir en esperanza”, “sabe reconocer los tiempos en los que vive”, “vivir más que discurso de acciones y en la compañía con el que sufre” y que “muestre caminos de nuevo humanidad para vivir en la comunión con Dios y su pueblo”.

Monseñor Silva enfatizó en su mensaje que “vengo a ser padre y pastor y juntos debemos vivir en la sinolidad (confraternidad) y servicio”.

Al final de la misa agradeció el servicio del padre Gonzalo Espina y de los agentes pastorales y dio a conocer su primer decreto como nuevo obispo que fue conceder al padre Espina el cargo de Vicario General de la Diócesis de Valdivia.

Finalizada la eucaristía varias comunidades parroquiales de la Diócesis, movimientos y congregaciones religiosas entregaron su saludo de bienvenida al nuevo 0bispo de Valdivia.