Chile se ha convertido en país potencia de América Latina. En consecuencia, Santiago, es una de las ciudades con más movimiento. Se vive una constante competencia, y si bien la calidad de vida ha mejorado, con ella parece haber aumentado la depresión.
Qué es la depresión
La depresión se suele confundir con un estado de tristeza, si bien el sentimiento es parte de la enfermedad, hay que aprender a diferenciar una cosa de otra. Una persona deprimida suele sentirse desamparada, su dolor va más allá de la tristeza, o del luto, es algo profundo de lo que no puede salir y del que es muy difícil salir.
Algo que hay que aclarar de la depresión, es que no tiene una edad. Esta enfermedad se puede presentar en niños, adolescentes, adultos o ancianos. Hay que olvidar el mito de que los niños no sufren de depresión y estar atentos ante esta posibilidad.
Entre los síntomas más comunes, además de la tristeza y desesperanza, está la incapacidad de sentir placer con tareas que el pasado causaban felicidad. La depresión es una enfermedad mental muy difícil de enfrentar y de la cual cuesta hablar.
Sana la depresión
Si bien la depresión es una enfermedad mental, hay muchas cosas que puedes probar para sentirte mejor sin recurrir a una pastilla antidepresiva. Cuidar tu alimentación es una excelente forma de empezar, agregar frutas como la piña o el mango, ayudan mucho en la producción de serotonina, al igual que el chocolate, en pequeñas cantidades.
El ejercicio también es una excelente forma de aumentar las endorfinas. Los orgasmos de manera regular también ayudan a enfrentar la depresión. También la buena compañía de seres cercanos, si no dispones de uno, descubre las escorts más profesionales en Santiago, representan una opción muy buena.
Habla de tus problemas
Una de las cosas más graves de la depresión es que la persona que la sufre suele encerrarse en sí mismo y no habla de aquellos pensamientos negros que lo aquejan. Si la desesperanza es algo común en tu día a día, o tienes muchos meses triste sin lograr salir del dolor, habla.
Expresar esos sentimientos negativos les quita poder. Si eres amigo de una persona depresiva y esa persona decide decirte sus pensamientos más oscuros, no lo juzgues por ellos, no los puede controlar. Ayúdalo a cambiarlos, dale comprensión y hazle saber que siempre puede decirte aquello que le duele.
Si eres una persona con depresión y no cuentas con una red de amigos en los que puedas confiar, no dudes en buscar un terapeuta. La depresión se trata con medicina alópata u homeópata, por lo tanto podrás encontrar un terapeuta acorde a tus creencias personales o tu comodidad.
Recuerda que si no consigues el terapeuta adecuado a la primera, no debes desmayar. Tu salud mental es tan importante como la salud física.
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