Vecinos de Futrono visitan la planta de tratamiento de aguas servidas de ESSAL

Con el fin de aclarar potenciales riesgos ambientales por posible ampliación de las instalaciones ubicadas en Pumol

El día 7 de diciembre vecinos de la comuna e integrantes del Movimiento por la Defensa de Futrono realizaron una visita a la planta de tratamiento de aguas servidas de ESSAL, ubicada en el sector de Pumol junto al río Quimán, con el objetivo de conocer el proceso de tratado de las aguas residuales de la comuna.

Fue precisamente el Movimiento por la Defensa de Futrono quien pidió a ESSAL esta visita a las instalaciones, teniendo presente que la empresa sanitaria se encuentra solicitando la aprobación de un proyecto de ampliación de la planta, y de no existir objeciones al proyecto este será aceptado sin consulta ciudadana a través de una declaración de impacto ambiental, lo que puede significar riesgos para nuestro medio natural, en especial para las aguas del lago Ranco.

En el lugar personal de la empresa entregó a la comitiva una charla sobre las etapas del tratamiento de las aguas servidas, y sus protocolos de seguridad.

CUESTIONAMIENTOS Y VACÍOS LEGALES

En la primera etapa del tratamiento de las aguas servidas es notorio un desagradable olor a suciedad y putrefacción, siendo conocido que vecinos de Pumol y Quimán lidian todo el tiempo con esos malos olores, por lo cual se preguntó a los funcionarios de ESSAL por qué no implementan un método para evitar que esa pestilencia se disperse, teniendo como respuesta que ”Chile no cuenta con leyes para el control de la emanación de malos olores”.

Asimismo se aclaró que, luego de varias etapas de tratamiento, la última fase es la cloración de las aguas servidas, lo que deja el agua apta para el riego, mas no para consumo. Es en este momento que las aguas ya tratadas son vaciadas al cauce del río Quimán, que desemboca en el lago Ranco a menos de 2 kilómetros de la planta.

La visita duró alrededor de 3 horas y permitió conocer este punto incógnito para la mayoría de los futroninos, que presta un importante servicio a la comunidad urbana pero que también hace necesaria la atención y ejercicio de control de parte de la propia ciudadanía para evitar eventuales amenazas por agentes contaminantes a nuestro entorno natural y a las personas.