Concejales de ocho comunas de Los Ríos exigieron a la Superintendencia de Servicios Sanitarios que informe sobre la presencia de asbesto en la red de agua potable

Preocupación surgió del edil paillaquino Miguel Ángel Carrasco

Concejales de 8 comunas de la Región de Los Ríos oficiaron a la Superintendencia de Servicios Sanitarios de Los Ríos para que investigue una serie de denuncias relacionadas con la presencia de asbesto en la red de agua potable y el manejo realizado de este elemento,  altamente cancerígeno,  por cerca de 15 años.

Los concejales Felipe Cañoles de La Unión, Miguel Ángel Carrasco de Paillaco,  Cecilia Aguero de Valdivia,  Fernando Flández de Futrono, Jermán Martínez de Panguipulli, María Huenchipán de Máfil, Jorge Figueroa de Lago Ranco y Catalina Hott de Rio Bueno oficiaron ante el ente público exigiendo respuestas a una serie de dudas que surgieron a raíz de denuncias ciudadanas.

"Una de ellas tiene que ver con cuántos metros de redes de agua potable son o se presumen de Asbesto Cemento en el área de concesión de agua potable perteneciente a las  comunas de Panguipulli, Futrono, Río Bueno, Máfil y Lago Ranco, La Unión,  Paillaco y Valdivia" , explicó el concejal Felipe Cañoles.

Nos interesaría saber además, "cuántos metros de redes de Asbesto Cemento se han retirado en los últimos años y qué protocolo ha realizado la concesionaria con este desecho cancerígeno", señaló el concejal Miguel Angel Carrasco.

No sabemos "dónde se encuentran depositados estos desechos y si se presentó a la Autoridad Sanitaria la solicitud de autorización de tratamiento o la disposición final de residuos sólidos industriales para Generadores”, agregó Catalina Hott.

Finalmente, los ediles fueron claros en afirmar que habitualmente, las tuberías se cortan con sierra, serrucho o esmeril, generando gran cantidad de material particulado fino, por lo tanto la duda que surge es qué alternativa usó la concesionaría para proteger a su personal y a la población.

ASBESTO: COMPUESTO CANCERIGENO

Es importante precisar que en Chile se utiliza el asbesto desde 1935, en esa época no se sabían los graves riesgos que tenía para la salud de las personas.

Sin embargo, en 1977 la Organización Mundial de la Salud declaró que el asbesto es cancerígeno en todas sus variedades.

En 1986, la Organización Internacional del Trabajo, mediante el convenio 162, recomendó a los legisladores de sus países miembros que sustituyan el asbesto por  otros materiales o productos o la utilización de tecnologías alternativas.

En Chile, las autoridades tardaron 15 años en dictar el Decreto Supremo 656, publicado el 13 de enero del 2001, que prohíbe “la producción, importación, distribución y venta de materiales de construcción, que contengan cualquier tipo de asbesto”.

Actualmente, está comprobada la relación entre la inhalación de partículas de asbesto y la aparición de cáncer de pulmón,  mesotelionas y asbestosis, enfermedades gravísimas y  sin cura", señaló la enfermera y concejala de Valdivia, Cecilia Aguero.

Si bien no existe evidencia que relacione el consumo de agua con asbesto y la aparición de patologías, el criterio hace aconsejable no esperar la aparición de estudios científicos para reemplazar las actuales cañerías por PVC.

"Tenemos  antecedentes que nos hacen suponer que estas sólo son cambiadas cuando se rompen  los antiguos tubos de asbesto cemento y ello expone innecesariamente a la población y a los trabajadores a estas partículas", explicó el médico y concejal de Paillaco, Miguel Ángel Carrasco.